El presidente Donald Trump, fiel a la política intervencionista de Estados Unidos (EEUU), mostró su decisión de arrebatar a Panamá el control de canal interoceánico al referirse al asunto como una acción de “seguridad nacional” para su país.
Durante su comparecencia ante el Congreso gringo la noche del martes, el mandatario aseguró que su administración “recuperará el canal de Panamá, y ya hemos comenzado a hacerlo”.
Para tal fin, detalló que “una gran empresa estadounidense” se encargará de comprar “los dos puertos que rodean el canal de Panamá” entre “muchas otras cosas” que tienen que ver con la estratégica zona comercial, cita una nota de RT.
Trump está convencido de que el canal es para los estadounidenses y “no para otros”, porque su construcción significó “un tremendo costo de sangre” de sus connacionales, así como también al tesoro de su país.
Presencia China y advertencia a Rubio
Uno de los puntos inadmisibles para Trump es la presencia de China en el canal porque pone sus intereses geopolíticos, económicos y comerciales bajo amenaza.
«No se lo dimos a China. Se lo dimos a Panamá y lo estamos recuperando», resaltó Trump ante el Congreso. Además, advirtió al secretario de Estado, Marco Rubio, que le echará “la culpa si algo sale mal” en su acometido de apartar al gigante asiático de la ruta comercial.
Precisamente, el funcionario logró en febrero pasado, que Panamá se comprometiera a no renovar el importante acuerdo comercial con China sobre la Ruta de la Seda.
Además, su oficina emitió un comunicado en el que supuestamente había acordado con el gobierno de Panamá que los buques estadounidenses no pagaran por transitar el canal, lo que significaría un “ahorro” de “millones de dólares al año” para Washington.
Sin embargo, este anuncio fue desmentido horas después por la Autoridad del Canal de Panamá, una entidad autónoma que administra la vía interoceánica, y que niega que se realizara «ajuste alguno» en los peajes y otros derechos por transitar el canal.
Plan gringo para recuperar el canal
El medio RT señala que Trump tendrá el control de la vía interoceánica una vez se concrete la negociación anunciada entre el conglomerado multinacional CK Hutchison Holdings, uno de los mayores operadores portuarios a nivel mundial con sede en Hong Kong, con un grupo de inversores estadounidenses que incluye a BlackRock Inc, Global Infrastructure Partners y Terminal Investment Limited.
El acuerdo entre ambos conglomerados, entre los que se encuentran algunos con antecedentes en negociaciones de “Fondos Buitre”, incluye la venta de una participación del 90 % de una empresa filial de CK, que explota los puertos Balboa y Cristóbal, ubicados estratégicamente en ambos extremos del canal de Panamá, lo que significa ceder a las empresas de EEUU el control de estos peajes.
Sin embargo, aunque se trata de una operación privada, la negociación requiere la aprobación del Gobierno panameño. Mientras tanto, se prevé que la documentación final de la transacción se firme a más tardar el 2 de abril de 2025.
EEUU es el mayor usuario del canal de Panamá, con un tráfico de contenedores de exportación e importación que representa cerca del 73% en esa zona portuaria y el 40% de todo el tráfico estadounidense de contenedores.
ultimasnoticias.com.ve
Ver fuente