Relájate y luce mejor - Últimas Noticias


El estrés continuado no sólo nos afecta en el día a día sino que, además, puede tener un efecto duradero y acumulativo sobre el organismo y la psique y producir problemas severos de salud mental y física en etapas posteriores de nuestra vida.

Las irritaciones del día a día van haciendo «que el vaso se colme» y, en concreto, son las respuestas emocionales negativas y molestias cotidianas las que tienen este efecto acumulativo: discusiones con la pareja, los conflictos en el trabajo, las esperas de pie en largas colas, el tráfico y otras situaciones que causan estrés a diario, son factores que predicen la aparición de angustia psicológica y de ansiedad.

Por ello, los especialistas recalcan la importancia de regular las emociones y mantener un equilibrio emocional, puesto que cambiar la forma de responder ante el estrés es tan decisivo para nuestra salud física y psicológica, como mantener una dieta saludable y seguir una rutina de ejercicio físico.

En definitiva, “quedarse quieto, sentado o de pie, sin hacer nada y prestando atención a la respiración durante unos minutos, es la mejor manera de calmar la mente, relajar el cuerpo y sentirse renovado”, apunta el psicólogo Iñaki Rivero. De allí que los expertos recomiendan hacer meditación así sea durante un minuto, cuando observemos que estamos intranquilos o tenemos “mente de mono”, que es aquel estado en el que los pensamientos van saltando por la mente como un mono salta de rama en rama.

Además, se aconseja meditar 10 minutos al levantarse por la mañana para limpiar los posibles malos sueños del inconsciente y tener un día tranquilo, y de 10 a 20 minutos por la tarde a las 20 horas, para aliviar las tensiones acumuladas durante el día.

BENEFICIOS DE “NO HACER NADA”

Para el psicólogo Iñaki Rivero, se puede aprender a descargar las tensiones acumuladas practicando la quietud, aprendiendo a vaciar el movimiento del cuerpo y, sobre todo, el de la mente.  El especialista propone un método sencillo y efectivo basado en la NO acción, «que después de practicarlo -asegura- permite que la persona se sienta renovada, con el cuerpo más ágil y la mente más clara”.

Este ejercicio para soltar las tensiones, que se recomienda hacer de pie, aunque también puede hacerse sentado, está indicado para personas con excesiva tensión física, mental y emocional; ansiosas, preocupadas, fatigadas o cansadas después de un día de trabajo, y se practica así, según explica el doctor Rivero:

1. Elija un lugar tranquilo donde no le molesten y que esté bien ventilado. Póngase de pie, con los pies juntos. Relaje los ojos de tal modo que estén semicerrados y respire de manera natural.

2. La cabeza estará erguida de manera natural, sin emplear fuerza y sin tensar la nuca. Los brazos cuelgan relajados a ambos lados del cuerpo (si está sentado, los brazos estarán descansando sobre las piernas).

3. Evite subir los hombros, déjelos caer hacia atrás y hacia los codos para que las tensiones salgan por los dedos de la mano.

4. Descargue el peso del tronco hacia abajo, hacia la pelvis. Afloje la cintura y sienta sus pies fuertes y sólidos. Para esto, debe evitar tensar en exceso sus muslos y sus rodillas, relaje también sus tobillos para que todo el peso de la cabeza, pecho, abdomen y piernas se expanda por el suelo a través de los pies.

5. Ahora siente cómo su cabeza está erguida y relajada de tal modo que la parte superior (la coronilla) roza el cielo mientras que sus pies están sólidamente enraizados en la tierra.

6. Si su cuerpo se balancea o se pone a hacer algún tipo de movimiento, déjelo que se exprese, no lo pare, se irá aquietando poco a poco, cuando elimine las tensiones acumuladas. Concentrándose en el bajo abdomen podrá parar el movimiento si desea finalizar el ejercicio.

7. En esta posición disfrute durante unos 5 minutos del placer de no hacer nada, dejando descansar la mente sin intervenir en ella, dejando que cualquier contenido mental o emoción, sigan su camino en lugar de ir detrás de ellos, apegarse a ellos o identificarse con ellos.

NOTA: Basta un minuto de meditación; para ello, sólo hace falta disponer de un temporizador (reloj, teléfono móvil, despertador, cronómetro) para medir la duración de esta práctica, y de una habitación cerrada (incluso un cuarto de baño) donde realizarla sosegadamente. Las respuestas emocionales negativas tienen un efecto acumulativo.


ultimasnoticias.com.ve

Ver fuente