En un movimiento que confirma explícitamente que el despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe, no tiene como objetivo combatir el narcotráfico, el presidente de ese país, Donald Trump, anunció este viernes que indultará al expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández (2014-2022), preso en una cárcel estadounidense por sus probados vínculos con el tráfico de estupefacientes.
«Estaré concediendo un total y completo indulto al expresidente Juan Orlando Hernández, quien ha sido tratado, de acuerdo con muchas personas a las que enormemente respeto, muy severamente y muy injustamente», reveló el mandatario en su red social Truth Social.
Trump informó del perdón en una publicación en la que reiteró su apoyo al candidato conservador Nasry ‘Tito’ Asfura, del Partido Nacional, agrupación política de Hernández que está siendo investigada por sus nexos con el narcotráfico. Honduras tendrá elecciones este y Trump prometió que «habrá mucho apoyo» para el país centroamericano, si dicho político gana.
«Voten por Tito Asfura para presidente, y felicidades a Juan Orlando Hernández por su próximo indulto», escribió.
Hernández llegó extraditado en abril de 2022 a Estados Unidos, donde en marzo de 2024 lo sentenciaron a 45 años de prisión por tres cargos de narcotráfico y armas, más cinco años de libertad vigilada.
La falsa lucha de Trump contra el narcotráfico
El presidente estadounidense emprendió un despliegue militar sin precedentes en el mar Caribe y otro tanto en el Pacífico oriental, en los que ha ordenado el asesinato de más de 80 personas que, según su administración, transportaban drogas hacia Estados Unidos. Este procedimiento lo ha enmarcado en una supuesta lucha contra el narcotráfico, delito del que acusa a los presidentes de izquierda Nicolás Maduro (Venezuela) y Gustavo Petro (Colombia).
Sin embargo, la cercana relación del gobierno de Trump con líderes de extrema derecha en Latinoamérica como Daniel Noboa, quien sí tiene vínculos con el narcotráfico, y Javier Milei, que tienen en su gobierno a funcionarios acusados de traficar drogas a Estados Unidos, ponen en duda la veracidad de esta operación antidrogas de Washington.
Al exmandatario centroamericano lo acusaron de haber recibido dinero del ‘Chapo’ Guzmán para financiar fraudes electorales a cambio de participar en una conspiración que introdujo más de 500 toneladas de cocaína en el país.
Trump reiteró en TruthSocial que la «democracia está en juego» en Honduras, donde advirtió de que el gobernante venezolano, Nicolás Maduro, y sus «narcoterroristas» podrían «tomar otro país como han tomado Cuba, Nicaragua y Venezuela».
«Si Tito Asfura gana la presidencia de Honduras, como Estados Unidos tiene tanta confianza en él, sus políticas y lo que hará para el gran pueblo de Honduras, daremos mucho apoyo. Si no gana, Estados Unidos no dará buen dinero porque un líder equivocado solo puede traer resultados catastróficos», dijo a pesar del prontuario del partido de derecha hondureño.
Lo que demuestra esta postura de Trump, es que su mensaje original de la lucha contra el narcotráfico, era solo un pretexto para influir en los cambios de gobierno de los pueblos de Latinoamérica y derrocar a los que están en el poder.
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