El relevista mexicano de los Cardenales de San Luis, Giovanny Gallegos, no fue el mismo de campañas anteriores. En eso influyeron molestias en el manguito rotador del hombro derecho. Sin embargo, eso no es excusa para oriundo de Ciudad Obregón y este año busca reivindicarse.
Lee también: Wheeler pacta con los Phillies por tres años
El ex receptor Yadier Molina se retiró tras 19 años detrás del plato por los Cardenales y se encontraba en algún lugar de su natal Puerto Rico cuando Gallegos le llamó para pedirle consejos.
Por años, Gallegos contó con la guía de Molina mientras estaba en el montículo para mantenerlo en el enfoque correcto, aun cuando la reacción del careta no era la más amigable que digamos. No sólo Gallegos nunca rechazó una sola seña del nueve veces ganador del Guante de Oro, sino que raramente rompía contacto visual cuando Molina le reprimía airadamente.
Después de que Gallegos le había contado a su amigo todos sus problemas, Molina acudió a su vasto banco de datos que tiene en su mente beisbolera, y el puertorriqueño recordó un momento positivo para el relevista.
Molina hizo que Gallegos reviviera una actuación a finales del 2021 cuando los Cardenales recibían a los Padres. Esa noche de septiembre, Gallegos salió desde el bullpen y dominó a los Padres de manera impresionante para cerrar el juego con algunas de sus rectas y sliders más venenosos.
Su 2023 fue complicado
“A veces le llamo a Yadi, y el año pasado le dije, ‘Bro, necesito tu ayuda porque no sé qué está pasando conmigo’. Me sentía terrible, y hablar con él me devolvía la confianza”, recordó Gallegos. “[Molina] me recordó aquella noche cuando [Adam Wainwright] lanzó un gran juego y luego yo ponché al último bateador. Después de ese último envío, Yadi gritó, ‘¡Oye tu [improperio], así es como se lanza! ¡Lo hiciste muy bien!’.
“Yadi es mi muchacho y un buen amigo. Siempre me da confianza porque hemos estado juntos en tantas situaciones diferentes”.
Gallegos, de 32 años, se encontraba en una situación bien diferente cuando finalizó la temporada del 2023 en la lista de lesionados con tendinitis en el manguito rotador derecho. Hasta ese momento, Gallegos había sido uno de los lanzadores más durables del béisbol, hasta el punto de encabezar la Liga Nacional en presentaciones (268) y entradas lanzadas como relevista (283.1) desde el 2019, según una investigación de MLB.
El mexicano lideró a los Cardenales en presentaciones en 2021 (73) y 2022 (57) antes de caer al tercer puesto la temporada pasada (56).
“Su buena disposición para tomar la bola cada noche es una de esas cosas que valoras realmente”, dijo el coach del bullpen de los Cardenales, el panameño Julio César Rangel. “Es parte de su naturaleza porque tiene un arduo deseo de ganar. Aun en los días cuando estaba un poco cansado – y eso es parte de ser un lanzador en una temporada bien larga — Gio se prepara a diario para lanzar cuando se le necesite”.
Los rivales atacaron más sus pitcheos
Todo ese trabajo podría haberle pasado factura a Gallegos en 2023 cuando vio su efectividad (4.42) y tasa de batazos duros en contra (46.2%) elevarse dramáticamente, según Baseball Savant. Su eficaz slider todavía le permitió ranquear en el mejor 2% de MLB en tasa de swings a pitcheos fuera de la zona de strike (35.1%) y en el mejor tres porciento en tasa de envíos abanicados (36.2%), pero fue menos efectivo en contra de bateadores derechos que contra zurdos.
Seis de los 11 jonrones que permitió en 2023 fueron frente a sliders. Incluso su recta – pitcheo contra el cual la oposición tuvo promedio de .208 en 2022 – fue castigada bajo un promedio de .267 y cuatro vuelacercas en 2023, según Savant.
Lasmayores
www.liderendeportes.com
Ver fuente