La participación de Jackson Chourio en el segundo juego de la Serie Divisional de la Liga Nacional, este lunes contra los Cachorros de Chicago, sigue siendo un misterio, al menos para todos aquellos fuera del dugout de los Cerveceros de Milwaukee.
El domingo, el mánager del equipo de Wisconsin, Pat Murphy, indicó que los resultados de la resonancia magnética que se le realizó en el tendón de la corva derecha al criollo dieron un resultado no concluyente, por lo que su participación en el juego dos continúa siendo una incógnita.
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En la rueda de prensa, el estratega señaló que tomarían una decisión luego del entrenamiento ligero que realizaría el joven jardinero venezolano durante el domingo y el lunes, hasta horas de la tarde antes de empezar el partido a las 9:08 de la noche. El marabino ya tomó dicho entrenamiento, pero su estado de salud es un «secreto de estado» por parte de Milwaukee.
Este lunes, Jackson Chourio corrió las bases a un ritmo ligero, pero no tomó práctica de bateo, ni fildeó elevados, al igual que lo hizo durante la práctica del domingo.
El coach de primera base de los Cerveceros, el dominicano Julio Borbón, explicó para MLB.com lo que busca en el tipo de entrenamientos por el que pasó el criollo tras su lesión del sábado, indicando que la adrenalina no se acerca en nada a la que hay en un juego, así que se trata más de la fluidez de sus pasos, de lo cómodo que se ve y de si hay alguna duda al correr, como la que suelen tener, generalmente, los jugadores que recaen de una lesión anterior.
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