La canciller de Colombia, Rosa Yolanda Villavicencio, advirtió este miércoles sobre los riesgos de la creciente presencia militar en el Caribe, señalando que «cualquier acción encubierta contra Venezuela sería una afrenta para la región y un desafío al derecho internacional».
“Hemos advertido que la presencia militar desorbitada en la región constituye una amenaza para América Latina y para el Caribe, sobre todo porque el Caribe en este momento es un territorio de paz… y queremos seguir siéndolo así”, declaró Villavicencio durante la Tribuna EFE – Casa de América.
La canciller resaltó que los problemas internos que enfrentan los países deben resolverse con autonomía y sin injerencia externa. “Ofrecemos las mediaciones que puedan darse para resolver algunos problemas internos y, si no, el respeto a que las naciones mismas puedan resolver sus sociedades con la madurez que tienen… desde ese punto de vista, toda esta escalada es realmente una agresión o una afrenta”, subrayó.
Sobre Venezuela, Villavicencio Mapy señaló que, aunque es «incierta» la posibilidad de una acción encubierta, Colombia continúa insistiendo en el «respeto a la soberanía y en el cumplimiento de los pronunciamientos de Naciones Unidas». “Advertimos que estas muertes extrajudiciales no pueden permitirse (…) Todas las naciones debemos respetarnos, porque lo contrario es la barbarie”, afirmó.
«Colombia busca mantener un diálogo con Venezuela»
La funcionaria también enfatizó que Colombia busca mantener un diálogo político y diplomático con Venezuela: “Seguimos teniendo la mano extendida diciendo que queremos el diálogo político, el diálogo diplomático, para resolver cualquier diferendo o cualquier opinión distinta que tengan sobre nuestro trabajo de lucha contra el narcotráfico”.
Villavicencio Mapy defendió los avances de Colombia en la lucha contra las drogas, insistiendo en que esta se ha desarrollado sin violar el derecho internacional humanitario. “El argumento de intervención basado en la lucha contra el narcotráfico es falso. No ha hecho falta violar el derecho internacional para intervenir en aguas internacionales”, aclaró.
Finalmente, Villavicencio Mapy se refirió a la deportación de colombianos desde Estados Unidos, asegurando que su país mantiene un diálogo permanente para garantizar el retorno seguro y voluntario de las personas afectadas. “Estamos recibiendo y mandando aviones todas las semanas para atraer a los deportados; esperamos que puedan regresar voluntariamente y sin pasar por centros donde no tienen libertad”, puntualizó.
Tensiones en el Caribe
El pronunciamiento de la canciller colombiana se produce en medio tensiones entre Estados Unidos y Venezuela por la mayor movilización militar estadounidense en el Caribe y el Pacífico en décadas, que incluye destructores, aviones de combate, buques de guerra y el portaaviones USS Gerald R. Ford.
La Casa Blanca reconoce haber bombardeado una veintena de presuntas “narcolanchas”, acciones que han dejado casi 80 muertos. Aunque Washington sostiene que se trataba de narcotraficantes, Human Rights Watch, expertos de la ONU y gobiernos del Caribe y Suramérica han advertido sobre posibles “ejecuciones extrajudiciales” y calificado los ataques como “ilegales”.
El presidente venezolano Nicolás Maduro ha denunciado en varias oportunidades que Estados Unidos estaría encubriendo un plan de “cambio de régimen” mediante una supuesta ofensiva antidrogas y ordenó la movilización de tropas en todo el país.
Por su parte, Gustavo Petro ha intensificado sus críticas hacia el presidente estadounidense, Donald Trump, acusándolo de cometer “asesinatos” y “crímenes de guerra” durante su ofensiva antidrogas.
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