La historia es rocambolesca y, a primera vista, raya en el absurdo. Un ente siniestro se aprovecha de la indefensión de los niños mientras duermen, para conducirlos a la muerte. Sin mucho esfuerzo y sin profundizar, ese es el origen de uno de los personajes más aterradores en la historia del cine: Freddy Krueger.
Lo absurdo se desvanece al saber que un hecho real inspiró a Wes Craven, para crear al protagonista de su saga Pesadilla en la calle del infierno o Pesadilla en la calle Elm, como es conocida en otros mercados hispanohablantes.
Craven siguió con atención los artículos publicados en Los Angeles Time, que daban cuenta de una serie de sucesos ocurridos en el sureste asiático, donde personas habían muerto mientras sufrían pesadillas. En particular, le llamó la atención el caso de un niño que se resistía a dormir, para evitar los sueños tormentosos.
Un día, rendido por el cansancio, cayó en brazos de Morfeo. Minutos después, los padres lo oyeron gritar y lo encontraron muerto. Al revisar su habitación, hallaron una cafetera oculta que le permitía mantenerse en vigilia y las pastillas que simulaba ingerir. La autopsia no pudo determinar la causa del fallecimiento, descartando que haya sido un infarto.
Ese caso de la vida real, como dicen los clásicos, fue la semilla que el 16 de noviembre de 1984 fue presentada al público, después de haber sido regada con minuciosidad y esmero. Cada detalle en la creación de Freddy Krueger fue producto de investigación y experimentación, a fin de hacerlo lo más escalofriante posible.
ROJO Y VERDE
Freddy Krueger ha mostrado cambios a lo largo de las nueve películas que ha protagonizado. Sin embargo, su suéter se ha mantenido constante. Craven eligió los colores rojo y verde, después de leer en una revista científica que son los que más chocan a la retina, con lo cual se logra una repulsa inconsciente.
La garra ha evolucionado. Comenzó como un artilugio creado con cuchillos caseros para convertirse en una extensión natural de la mano. En el terreno de la ficción y con el personaje consolidado, todo es posible.
La apariencia espeluznante responde a la literatura biográfica. Frederick Charles es el producto de la violación que vivió su madre, una monja interna en siquiátrico. El pequeño, dado en adopción, resulta maltratado por su padre postizo. Canaliza su frustración con los animales y, ya adulto, se dedica a asesinar niños en Springwood, hasta alcanzar 20 víctimas. Un falló en el procedimiento judicial lo deja en libertad y los vecinos deciden actuar por su cuenta, quemándolo vivo. Entonces, comienza la pesadilla.
Grupete
Freddy Krueger es infaltable en cualquier lista que se elabore con los personajes más aterradores del séptimo arte.
Comparte el cuestionable honor con clásicos como Drácula y Frankenstein, además de otros más contemporáneos: Jason Voorhoes de ‘Viernes 13’, Michael Myers de ‘Halloween’, Pennywise de ‘It’ y Chucky. A ellos se suman: Regan MacNeil de ‘El exorcista’, Hannibal Lecter de ‘El silencio de los inocentes’, Norman Bates de ‘Psicosis’, Damien Thorn de ‘La profecía’, Jack Torrance de ‘El resplandor’ y Annie Wilkes de ‘Misery’, aunque hay más.
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