Jorge Rodríguez instala Consejo de pesca por la soberanía y la paz en La Guaira


El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, realizó este sábado por la Plaza Bolívar de Caracas, un recorrido donde observó los ejercicios militares especiales. Fue propicio el momento para que señalara que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) es un nuevo cuerpo que no se «arrodilla» y precisó que la patria está en buenas manos, al ver a los integrantes de la milicia trabajar en coordinación con los oficiales.

Rodríguez señaló que «el sueño que Hugo Chávez tuvo y que desarrolló desde el primer día de su presidencia, desde el triunfo de la Revolución Bolivariana, era construir una FANB absolutamente consustanciada con el pueblo».

Recalcó que la premisa del comandante Hugo Chávez era lograr un «ejército pueblo y un pueblo ejército, ordenado, organizado, sabiendo bien cuáles son sus tareas y por ello se han venido haciendo una serie de ejercicios, no solamente militares, sino de incorporación del pueblo a las actividades de milicia, a las actividades de entrenamiento de tiro, desplazamiento».

Refirió que se han hecho operativos para que el pueblo reciba información y entrenamiento.

Recordó que la FANB ha ido de los cuarteles a los barrios, a recorrer casa por casa, y este sábado se ha llevado a cabo una especie «de resumen para evaluar las capacidades de comando, de control y en especial de comunicación».

«La comunicación es fundamental en el momento que tengamos que defender el territorio sagrado de la patria venezolana. No solamente vimos los procedimientos naturales de comunicación, sino formas alternas que el pueblo tiene para comunicarse y que esas formas alternas nos permitan saber a dónde irse el efectivo, a dónde debe estar desplazado un contingente, cuáles deben ser las tareas de un jefe de comando», expresó.

Rodríguez resaltó que lo más importante es el comando. «Cuál es la función, la misión de un jefe de comando(…) el planteamiento es que cada mujer de Venezuela sea una soldada, cada hombre un soldado, cada uno de nosotros, somos herederos de las glorias de los Libertadores de América. Por nuestra sangre corre la sangre de Simón Bolívar, de Antonio José de Sucre, de Luisa Cáceres de Arismendi. Que cada uno de nosotros sepa cuál es su misión, cuál es su función y cuál debe ser su actitud en caso de una agresión de un enemigo extranjero».

Reiteró que los venezolanos son gente de paz que siempre han promovido la solidaridad, generosidad, y la compasión, pero advirtió que «no se metan con nuestro territorio, con nuestro sagrado suelo, con el cielo sagrado de la patria; en ese caso se van a encontrar la fuerza, la fiereza y la valentía de todo el pueblo de Venezuela».

Puntualizó que ante las provocaciones, amenazas, calumnias, mentiras y estupideces, la respuesta ha sido la que no esperaban quienes se pronuncian por el conflicto armada, ya que casi el 100 por ciento de la población rechaza una agresión y está dispuesta a defender la patria ante cualquier situación.


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