El presidente de la República, Nicolás Maduro, afirmó este martes que el pueblo tiene la conciencia, tiene el poder y el pueblo garantiza todos los escenarios que se presenten y que se pudieran presentar. «Es el pueblo el verdadero poder».
Así lo manifestó el jefe de Estado durante su participación en el taller de las 7T para la acción transformadora con diputados y diputadas a la Asamblea Nacional que se desarrolla en la sala José Félix Ribas del teatro Teresa Carreño en Caracas que tiene como objetivo principal establecer los lineamientos estratégicos que guiarán el desarrollo del país en los próximos años
Maduro destacó que nosotros, somos simples instrumentos de un pueblo que ha decidido tener Patria. «Solo es posible en Revolución». Refirió que estar en estos niveles de dirección, no puede significar el acomodo. «No puede significar jamás el acomodo, la flojera, asumir los cargos para actividades que no tengan que ver con las necesidades del pueblo».
«Nosotros somos gente de doctrina, de pensamiento, de estrategia, de planificación. Somos gente seria que trabaja en base a un ideal, el ideal de la patria. En base a una doctrina, la doctrina bolivariana, en base a un legado, el legado inmenso que dejó el comandante Chávez para este siglo y los siglos futuros», expresó.
El mandatario nacional recordó las palabras del comandante Hugo Chávez quien decia que hay que vestirse de humildad, bañarse de humildad, de la honestidad absoluta, «no utilizar los cargos que el pueblo le ha dado para beneficio propio ni para violar las leyes o hacerle daño al pueblo. La honestidad, la fidelidad, la lealtad».
«La revolución será siempre implacable contra aquel que viole los principios éticos, morales y utilice sus cargos para el delito, la criminalidad o la corrupción. La honestidad, la lealtad, la fidelidad, la autosuperación y la auto exigencia permanente. En todas las tareas que se le asignen», dijo.
Resaltó que en años recientes han surgido ejemplos de personas que, al asumir roles parlamentarios, intentaron utilizarlos con fines ilícitos, como corrupción, traición e incluso vínculos con el narcotráfico. Ante ello, enfatizó la importancia de la ética revolucionaria y del compromiso genuino con el pueblo venezolano.
Además, subrayó que cada diputado debe formarse con profundidad en las tareas asignadas, convirtiéndose en expertos en los temas que el Parlamento demande.
Asimismo, destacó que el Poder Legislativo debe consolidarse como el epicentro de los debates políticos, geopolíticos, culturales y económicos, a través de la promoción del desarrollo nacional.
«Nosotros somos simples instrumentos de un pueblo que ha decidido tener patria», afirmó el mandatario nacional, para señalar que la Revolución debe garantizar que los cargos públicos sean asumidos con responsabilidad y dedicación exclusiva a las necesidades populares.
Como parte de este proceso de transformación, el Ejecutivo ha orientado el proyecto hacia la modernización de los sectores productivos y el fortalecimiento de las políticas públicas, para impulsar el crecimiento económico y la transformación social de la nación.
Este enfoque reafirma la voluntad del gobierno nacional de consolidar un Parlamento comprometido con la ética, el desarrollo y el bienestar de Venezuela.
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