Corto pero sustancioso. Así fue el concierto que ofreció la banda Molotov en la Concha Acústica de Bello Monte, en Caracas, la noche del sábado 16 de agosto, a propósito de la celebración de sus 30 años de formación.
La agrupación mexicana inició su espectáculo a las 8:00 de la noche con un video resumen de su historia, ante fanáticos que desde las 4:00 de la tarde se dieron cita en el lugar, repleto por sus cuatro costados con fanáticos de todas las edades.
‘Que no te haga bobo Jacobo’ dio inicio al performance de los aztecas, que entre broma y broma entre ellos y con la audiencia se pasearon por temas como ‘Me convierto en marciano’, ‘Parásito’, ‘Lagunas mentales’, ‘Here we kum’, ‘Hit me’ o ‘Me convierto en marciano’; no obstante, fueron ‘Amateur’, ‘Frijolero’, ‘Gimme tha power’, ‘Más vale cholo’ y ‘Puto’ las más coreadas de una noche que sirvió para recorrer la discografía de la banda.
Fue además un encuentro para divertirse con las ocurrentes letras de las canciones, pero sobre todo para identificarse con la crítica política que hace el grupo. En ese sentido, Ayala destacó que ‘Gimme tha power’ es una descripción de la historia de Latinoamérica, desatando la euforia de los miles de fanáticos que acudieron al concierto producido por Cusica.
Final inesperado
La velada estuvo cargada de grandes dosis de energía. Pese a las características propias del lugar, hubo grupos que hicieron «ollas» y rockeron con las estridencias de la banda o el solo de Jay de La Cueva, quien expresó su agradecimiento a sus «hermanos de Molotov» por incluirlo en esta gira aniversario. «Tenía 18 años sin venir a Venezuela», dijo el músico.
El momento más especial del concierto fue el final. Para interpretar ‘Rastaman-Dita’ invitaron a subir al escenario a una veintena de mujeres que bailaron el popular tema, mientras que una joven de nombre Nadeska tomó el bajo principal para tocar el tema entero. Paco destacó el talento de la joven y entre risas insinuó despedir al bajista y contratar a la criolla, mientras él tocaba la percusión.
A las 9:41 de la noche, y para sorpresa de muchos, cerró el espectáculo. De camino a la salida se repetía que el reencuentro con Molotov duró muy poco, pues fue una hora y 40 minutos de show el que ofreció la icónica banda.
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