El Senado de Estados Unidos consiguió el domingo aprobar el voto de procedimiento para avanzar hacia un proyecto de ley que desbloquee fondos para reabrir el Gobierno federal, tras cumplir 40 días cerrado por la falta de acuerdo entre demócratas y republicanos.
Poco antes de las 11:00 pm hora local, el Senado obtuvo los 60 votos que necesitaba para avanzar hacia un compromiso que permita pagar a los funcionarios y a las agencias federales, luego de que siete senadores demócratas y uno independiente respaldaran la iniciativa.
El acuerdo aún debe pasar por otros votos en el Senado y finalmente por la Cámara Baja, donde hay división en ambos partidos.
La iniciativa abarca el pago de más de 650.000 funcionarios que durante el tiempo de cierre no han recibido una nómina ni el pago retroactivo; así como el financiamiento de los departamentos de Agricultura -que se encarga de los cupones alimentarios para los más pobres-, Asuntos de Veteranos y otras agencias hasta el 30 de enero.
Medios internacionales reseñaron que los republicanos prometieron a los demócratas que en diciembre próximo votarían para extender los subsidios de la Ley de Cuidado Asequible, más conocida como Obamacare, que finalizan este año y era el principal obstáculo para extender el presupuesto.
Este cierre del Gobierno federal tuvo un récord de 40 días, siendo el más largo de la historia estadounidense, y ocasionó la suspensión de sueldo para cientos de miles de funcionarios federales, el cierre de servicios básicos y recortes en programas federales.
Asimismo, el impago de cupones de alimentos para los más pobres, largos retrasos en aeropuertos y el tráfico aéreo por la escasez de controladores o miembros de la seguridad aeroportuaria.
El cierre administrativo comenzó el pasado 1 de octubre, cuando expiró el presupuesto federal anterior, luego que demócratas y republicanos no lograran un acuerdo para el financiamiento provisional. Las siguientes votaciones realizadas en el Congreso para reabrirlo también fracasaron, ya que republicanos y demócratas no se ponían de acuerdo para aprobar un proyecto de ley que financie los servicios gubernamentales.
Los demócratas abogaban por un proyecto que incluyera la extensión de los subsidios de atención médica que están por vencer, pero los republicanos buscaban negociar los subsidios de seguro de salud por separado y aprobar solo lo que denominan una «resolución limpia».
ultimasnoticias.com.ve
Ver fuente