El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por su sigla en inglés) informó que más de 56.000 niños y niñas han perdido a uno o a ambos padres durante los dos años de la ofensiva llevada a cabo por Israel.
La directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, afirmó que el resultado de estos dos años ha sido una «devastación catastrófica en toda la Franja de Gaza», dejando más de 64.000 niños muertos o heridos.
Además, recordó que viviendas, escuelas y hospitales quedaron destruidos, mientras que los servicios esenciales han colapsado y la magnitud de las necesidades humanitarias es «descomunal».
«Se ha declarado hambruna en algunas partes de la Franja de Gaza, y el total de la población de menores de cinco años –320.000 niños y niñas– están en peligro de sufrir malnutrición aguda. Más de 56.000 niños y niñas han perdido a uno o a ambos progenitores. Todos los niños y niñas han sufrido acontecimientos traumáticos y su educación se ha visto enormemente interrumpida», acotó.
Russell aseguró que Unicef recibe con satisfacción la noticia del alto al fuego anunciado en la Franja, tras el acuerdo entre el movimiento de resistencia palestina, Hamás, e Israel, lo que «brinda esperanza a los niños y niñas que llevan dos años sufriendo» por el conflicto.
Igualmente, recalcó que Unicef cuenta con más de 1.300 camiones preparados con tiendas de campaña, productos nutricionales, vacunas y medicamentos esenciales, material educativo y de ocio, así como suministros relacionados con el agua y el saneamiento, para distribuirlos en el territorio.
Llamó a que las partes cumplan con los términos del acuerdo y que garanticen el respeto al cese al fuego, que se mantenga y lleve a una paz duradera.
También instó a que todos los pasos fronterizos a Gaza sean abiertos de forma inmediata para que pueda ingresar la ayuda humanitaria, los productos de primera necesidad y los suministros básicos.
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